¿Qué es y cómo funciona el control de estabilidad ESP o DSC?

Dirección del vehículo como seguridad activa.

Boton de control de estabilidad ESP
En la mayoría de vehículos puedes desactivar el control de estabilidad ESP, algo totalmente no recomendable a no ser que sea ocasión especial. Como por ejemplo nevadas, en conducción deportiva dentro del circuito...etc.

El control electrónico de estabilidad (ESP) es en materia de seguridad uno de los avances más eficaces en lo que la seguridad activa del vehículo se refiere. Se calcula que un 40% de los accidentes de tráfico mortales son debidos a los derrapes ocasionados por la perdidas de control del vehículo, con este sistema se estima que un 80% de este tipo de accidentes podrían ser evitados.

¿Qué es control de estabilidad?

Aunque lo denominemos por ESP en realidad tiene unos cuantos nombres. Ya que varia según la marca del vehículo. El mas conocido es ESP o "Elektronisches Stabilitätsprogramm" cómo lo llamó Mercedes Benz el día que lo desarrollaron junto a Bosh para estrenarlo en Mercedes Clase S en el año 1995. En otras marcas puedes encontrar lo mismo pero con el nombre de DSC, VDC, ESC o VSC.

Su función es hacer que el vehículo mantenga la trayectoria que dicta el conductor al volante, con lo que se reduce de manera importante los accidentes viales ocasionados por los repentinos  derrapes, minimizando sus efectos y ayudando a recuperar la trayectoria ordenada por el conductor al volante permitiéndonos salir airosos de complicadas situaciones en las que nos podemos ver envueltos en algún momento.

En diversas ocasiones de nuestra conducción diaria, pueden aparecer fuerzas transversales que afectan al vehículo, estas fuerzas pueden ocasionar inestabilidad en el vehículo y si giramos el volante demasiado rápido se puede ocasionar una fuerte inestabilidad en el vehículo propiciando la falta de adherencia. Es aquí cuando el control de inestabilidad electrónico (ESP) entra en acción, interviniendo en los frenos y en caso necesario en el motor y en la caja de cambios.

¿Cómo funciona el control de estabilidad?

Su funcionamiento depende de un micro-ordenador y una serie de sensores que trabajan  en todo momento monitorizando la trayectoria del volante, la velocidad de giro de las ruedas, su dirección y desplazamiento de vehículo. En situaciones de riesgo actúa frenando selectivamente y de forma individual las ruedas para evitar con ello la perdida de adherencia de alguno de los neumáticos que puedan llegar a originar derrapes que llevarían a la perdida de control del automóvil, evitando situaciones muy peligrosas que podrían conllevar fatales consecuencias. El ESP está compuesto por una unidad de control electrónico, unos actuadores en el sistema de frenado y un conjunto de sensores:

  • Sensor de ángulo de dirección, el cual informa desde la columna de la dirección sobre el movimiento del volante.
  • Sensores de velocidad de giro. Se sitúan en las ruedas e informan sobre posibles bloqueos.
  • Sensor de ángulo de giro y aceleración transversal. Este sensor informa del comportamiento real del vehículo.

Siempre es recomendable la adquisición de aquellos coches que dispongan de ESP, aunque siempre se debe tener en cuenta que el sistema no es fiable al 100%. Las fuertes fuerzas transversales en una situación de emergencia pueden superar las capacidades del sistema para restablecer la trayectoria deseada. El conductor en todo momento deberá ser prudente y conducir de igual forma que si su coche  no estuviera provisto de este sistema. No ver encenderse el testigo del ESP  es síntoma de que estamos ejerciendo una buena conducción.

Los vehículos provistos de ESP o control de estabilidad suelen llevar un botón para desconectarlo, este botón desconecta en muchos casos también el control de tracción, el cual resta mucha potencia al ponernos en marcha por ejemplo en rampa con hielo o lluvia. En coches deportivos se puede desconectar, para que el piloto sea el encargado de controlar en todo momento los derrapajes del vehículo. Siendo recomendable ejercer este tipo de conducción   dentro de un circuito.